Actualmente, las empresas bien estructuradas operan en dos líneas: física y digital. En la esfera física, realizan sus operaciones rutinarias (administración, finanzas y logística) y almacenan. Ya desde la perspectiva virtual, actúan a través de blogs, comercio electrónico, sitios web, canales de contacto, etc.
¿Qué es Big Data? Big Data no es más que una base de datos extremadamente grande que se puede segmentar o analizar computacionalmente para revelar patrones, tendencias y asociaciones, especialmente relacionadas con el comportamiento y las interacciones humanas.
En la práctica, las empresas aplican este mecanismo para contextualizar las interacciones con los clientes a través de diversos canales, comprendiendo mejor su perfil en función de la identificación, el procesamiento y la lectura de un gran flujo de información, como su historial de compras y Su comportamiento, especialmente en la web.
Esta herramienta no es nada nueva para el universo tecnológico y el mercado empresarial. Sin embargo, ganó reconocimiento en la década de 2000, con la consolidación de Internet y los procesos informáticos en las organizaciones. Hasta ahora, su potencial no ha dejado de crecer.
Con el volumen casi infinito de información actualmente disponible, es muy difícil determinar un límite para el uso de Big Data por parte de las marcas. Gradualmente, el factor limitante es la creatividad humana, así como la imaginación cuando se trata de idealizar nuevas tendencias.
En la actualidad, hay una serie de propuestas que ya se están abordando a nivel normativo para la protección de datos. Esto es un reflejo de un intento por regularizar esta práctica de análisis de datos, pero en el fondo, el propósito principal de toda esta historia es brindar al cliente la experiencia adecuada. En ese caso, la mejor decisión a tomar sería una que sea buena para el cliente y la empresa.
Al igual que otras revoluciones tecnológicas que tenemos disponibles hoy, Big Data está cambiando totalmente nuestra percepción del mundo y del mercado. Este es el momento perfecto para unirse a la herramienta.